Hígado
de ternera con salsa de champiñones al calvados y puré de patatas
Ingredientes
(para 2 personas)
Para el hígado y la salsa:
300 gramos de hígado de ternera cortada en tiras,
200 gramos de champiñones blancos,
1 cebolla,
30 gramos de nata,
150 ml. de caldo de ternera,
2 cl. De Calvados,
1 c/s de harina,
2 c/s de aceite neutro para saltear,
Sal, Pimienta recién molida.
Para
el puré de patatas:
400 gramos de patatas,
40 gramos de mantequilla,
60 gramos de nata,
60 gramos de leche,
Nuez Moscada, Sal, Pimienta,
1 c/s de aceite de oliva.
Para decorar:
2 c/s de pan rallado,
1 c/s de mantequilla, Perejil.
Preparación:
Hígado y salsa; Pelar y picar la cebolla en juliana.
Limpiar los champiñones y cortarlos en láminas.
Poner en una sartén una cucharada de aceite a calentar.
Echar la cebolla y dejar dorar a fuego medio.
Echar ahora los champiñones y dejar también que tome
color dorado. Salpimentar, sacar y reservar.
Añadir el resto del aceite y echar ahora las tiras de hígado. Saltear un poco y espolvorear la harina por encima.
Volver a poner los champiñones en la sartén junto con el hígado.
Verter ahora el caldo, llevar a ebullición y echar el Calvados.
Echar la nata y dejar hasta que el hígado esté en su punto. No pasarse de tiempo porque se endurece.
Puré de patatas; Pelar y cortar las patatas en cuatro.
Ponerlas a cocer en agua con sal hasta que estén blandas.
Poner en un cazo la nata, la leche y la mantequilla.
Dejar cocer durante 3 minutos.
Escurrir las patatas, volver a ponerlas en la olla, y con un prensa-patatas aplastarlas. Salpimentar y aromatizar con la nuez moscada.
Verter los líquidos mientras removemos el puré.
Por último, echar la cucharada de aceite de oliva y remover.
Para decorar; Poner la mantequilla en una sartén a derretir.
Cuando esté espumosa echar el pan rallado y sin dejar de remover dorarlo.
Picar las hojas del perejil.
Para servir; Poner en los platos una porción de puré de patatas y cubrirlo con el pan rallado tostado.
A un lado poner las tiras de hígado con los champiñones y espolvorear
con el perejil picado.
c/s = cucharada sopera
c/p = cucharada postre
c/c = cucharada café
c/n = cantidad necesaria
A nosotros sí nos gusta el hígado, no compro el de ternera, sino el de cerdo o higaditos de pollo. Tu receta tiene un aspecto muy bueno, no suelo poner nata en casi nada, pero en hígado no la he incorporado nunca, es un ingrediente que ni se me ha pasado por la cabeza poner y a lo mejor hasta me gusta. Lo que tengo claro es que a ese plato le metía mano en cuanto lo tuviera delante. Que ganas!
ResponderEliminarBss
No puedo con el hígado, pero a mi marido si le gustaría!!
ResponderEliminarUn beso
Hola Pepi. El hígado es una de las cosas que no puedo con ellas. Le cogí tal manía que solo con verlo ya se me quitan las ganas de comer. Debió ser que de pequeño mi madre me dio bastante, eran otros tiempos. Solo me comía la parte exterior porque estaba muy hecha y aún me costaba esfuerzo, para disimular me ponía tomate frito jj.
ResponderEliminarDe lo que sí daría buena cuenta es de la salsa y del puré, con eso me conformo y ya tengo suficiente jj pero es que al verla imagino que tiene que estar como para perder el sentido jj.
Un abrazo y cuídate.
Hola Pepi !
ResponderEliminarA mi me ocurre lo mismo, no me gusta, solo lo como de tarde en tarde , pero a mi marido le encanta , así que se lo hago para el encebollado y con manzana que es como lo prefiere.
Esta receta tuya estoy segura que también le encantaría porque se ve extraordinaria.
Un abrazo.
A mi el hígado que mas me gusta es el de cordero, aunque el de ternera, así como lo has cocinado, ha de estar deliciso.
ResponderEliminarSaludos.
Pepi, me gusta el hígado de ternera, aunque hace años que no lo como porque en casa nadie lo quiere, mi madre lo compraba solo para mí, pero luego con lo del tema de las cosas raras que les daban a las vacas, y que todo se acumulaba en las vísceras, dejó de cocinarlo muy a mí pesar, Jajajaja... Por cierto, yo también rebañaría ti plato, tiene muy buena pinta.
ResponderEliminarBesos
Pepi que rico y con ese acompañamiento , me gusta, besitos
ResponderEliminarHola amiga, a mi me pasa lo mismo que ha Raquel,no tomo higado pero a mi marido te haría la olaaaa
ResponderEliminarbesitos miles¡¡¡
E,n higado es un plato que no tiene muchos admiradores🤷♀️no es mi caso pues me gusta con mucha cebolla,al ajillo o simplemente a la plancha asi que a tu plato ni le pongo,ni le quito...me lo comería tal cuál 😋 besinos wapa
ResponderEliminarHola Pepi, que rico tu plato. Hace mucho que no compro y la verdad que no tardaré. Me ha recordado platos de familia, que mi madre solia hacer mucho. un beso :)
ResponderEliminarHola Pepi, viendo las fotos me ha entrado un antojo tremendo de hígado, hace tanto que no lo como, nunca lo compramos aquí en casa, a me me gusta pero lo repito, mi esposo nunca ha dado señales que le guste o no pero estoy segura que si preparo algo como tu plato dejábamos el plato limpito. Me guardo tu receta, buscaré pronto una pieza de hígado ;)
ResponderEliminarUn beso!
Mi marido y yo somos de casquería, así que hoy disfrutamos los de tu receta. Me la llevo sin dudarlo. Besos!!!
ResponderEliminarHola guapa, Tiene un color ese hígado que dice a gritos lo rico que está. Los champiñones combinan a la perfección con este tipo de carne. Hace mucho tiempo que no como hígado de ningún tipo a excepción del de pato u oca, en paté claro. Pero viendo ese color de la salsa y todo el acompañamiento se me antoja con un buen vino tinto. Perfecto¡¡¡¡¡🍷🥖🍷🥖Tu me sirves un plato y yo le pongo el pan para mojar y el vino¡¡¡¡
ResponderEliminarMi Pepi bonita siento que han pasado siglos que no vengo por tu cocina, que estuve más bien fuera de redes, aprovechando días de sol y salidas; pero bueno, poquito a poco voy adelantando cuaderno. Te digo que aunque no tengo ninguna receta con hígado en el blog, creo que podría ser del equipo de tu marido perfectamente, yo no sé pero a mí estos cortes me parecen tan ricos, tienen esas texturas diferentes y que a la vez pueden sorprendernos. Me das ideas para traer hígado y compartir la que hacemos en casa (que hace mucho no preparo, eso de estar haciendo nuevas cosas, pasa que se van los días y muchas veces dejamos de cocinar platos que por lo menos me recuerdan la infancia). besos
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